El hotel es un edificio histórico que data de 1610, es bonito en cuanto a áreas comunes. Es de fácil acceso y está en pleno centro de la ciudad, lo que es muy conveniente. Los viernes tiene música en vivo y su lobby bar es muy agradable.
En cuanto a habitaciones, estas son muy básicas, no ponen amenidades, las camas son algo duras y se empiezan a sentir los resortes, el internet no funciona nada bien y la TV lo mismo, la persona de mantenimiento fue a checarla y nos dijo que si queriamos ver Youtube teniamos que usar nuestro propio internet ¿¿??
El servicio NO es de lo mejor, nos tuvieron esperando en el lobby por MAS DE UNA HR con un turno para hacer check in y luego 20 min mas para que nos llevaran a la habitacion...El personal no es grosero pero tampoco amable, solo se les vio caras largas...
Es bonito edificio y muy céntrico, pero no creo que volvería.